Alteridad y elecciones 2024: El laberinto de la identidad en México.
Artículo: Alteridad y elecciones 2024: El laberinto de la identidad en México.
Ciudad de México, 28 de marzo del 2023
Introducción
El presente artículo pretende explicar la importancia de la Alteridad en un proceso electoral venidero en México, considerando el modelo [multi]partidista existente y cómo ello permea en la identidad de las personas en cuanto la adopción de una cultura democrática.
Aproximadamente 95 de millones de personas electoras (Forbes, 2021) decidirán tanto en el interior del País como en el extranjero en primer lugar si van o no a ejercer su derecho al voto y acto seguido elegir su preferencia.
Estas elecciones pondrán en tela de juicio los vínculos entre cultura política e identidad colectiva, para entender valores, cosmovisiones, ideologías, intereses, las actitudes, los conocimientos, las habilidades y las representaciones de la ciudadanía a la hora de relacionarse con la política. Y es justo el papel de las personas como centro de toda política pública que este artículo se concentra en la Alteridad.
Veremos como aspectos transversales en la historia de la persona y su relación con la cultura política dan pie a la subjetividad y que son importantes en la identidad, así también elementos que permitan dilucidar a la cultura política como referente en la constitución de expectativas, valoraciones, concepciones y utopías referentes a la política aprendida y aprehendidas a partir de la socialización en un espacio social específico y como la alteridad supone, como teoría, una explicación de los vínculos constitutivos entre el yo y lxs otrxs, como imperativo ético y un “norte” de justicia, de condición mínima para los pueblos, o bien sirva como síntesis de lo anterior y parafraseando a Pedro Laín: “el pronombre ‘nosotrxs’ es una de las palabras clave de nuestra atormentada situación histórica. (Laín Entralgo, Pedro. Teoría y realidad del otro, Alianza, Madrid, 1966, p.396.)
Persona y cultura política
Partamos de lo que menciona Denis Cuche sobre el concepto etnológico de cultura de Burnet Taylor: Cultura o civilización, tomadas en su sentido etnológico más extenso: es todo complejo que comprende el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y las otras capacidades o hábitos adquiridos por la persona en tanto miembro de la sociedad, el mismo autor continúa explorando a Marcel Mauss cuando señala: la civilización de un pueblo no es otra cosa que el conjunto de sus fenómenos sociales (Cuche, Denis, 1999).
En la democracia griega, algunos elementos que ellos identificaban con la democracia y que ahora ya no le damos tanto valor es el diálogo, la conversación, la discusión de ideas y la confrontación, por eso es que los griegos antes de llamar a la democracia con tal nombre la llamaron Isegoría que quiere decir igualdad de palabra. (Michael Foucault, Texto libro II, Education, 2011, p. 38. Isegoría en gallego 2003:100-107)
En los últimos años, producto en gran medida de las nuevas tecnologías si bien tenemos el fenómeno del repunte en la participación de la sociedad mexicana en asuntos de carácter público, esto no ha sido suficiente en la incipiente y atropellada (p.ej. corrupción y violencia), democratización pretendida, y esta no ha logrado desplazar del todo antiguas relaciones como son la intermediación, el clientelismo y el corporativismo; creando un malestar significativo para con la democracia que tenemos siendo así que el problema de la identidad de los pueblos remite a su cultura y a un sistema electoral en México que desde hace varios años pasa por una crisis de credibilidad ante la ciudadanía reflejada en el abstencionismo del voto y la polarización social.
Identidad colectiva y alteridad
El laberinto en su entramado resalta entre otras formas geométricas su complejidad, como decía Octavio Paz: en la búsqueda del presente el ser humano trata de recorrer el laberinto entre la confusión y el extravío buscando la otredad, oscilando entre soledad y comunión, buscando su historia, ser historia frente al pasado, presente y futuro (posible), laberinto que es viaje, transito, peregrinación. El laberinto de la soledad describe —y relata al mismo tiempo— el tránsito del/la mexicanx por el laberinto en el que consisten su vida y su historia.
Ambas transcurren en el vaivén entre los opuestos de una estructura binaria. De una parte se aprecia una relación que puede ser de correspondencia o no correspondencia entre la forma y la realidad, entre la razón y el instinto. Por la otra, vida individual e historia colectiva siguen el camino de una vacilación entre opuestos en el plano del ser: soledad y comunión, ocultamiento y revelación, cierre y apertura, autenticidad e inautenticidad. (Rico Moreno, 2015).
Villoro manifiesta que la “identidad” se refiere ahora a una representación que tiene la persona. Significa, por lo pronto, aquello con lo que la persona se identifica a sí mismo. De ahí la importancia de la noción de “sí mismx” (self, soi, Selbst ), por tanto concibe que la representación que una colectividad tiene de sí misma no siempre se vuelve tema de una reflexión expresa, se manifiesta en los comportamientos colectivos, se transmite en la educación, se difunde en los medios de comunicación, se discute en las controversias políticas, se expresa en las obras culturales y en las formas de convivencia, a menudo de manera implícita y poco consciente.
Por la identidad de un pueblo podemos entender lo que una persona representa cuando se reconoce o reconoce a otra persona como miembro de ese pueblo Se trata, pues, de una representación intersubjetiva, compartida por una mayoría de un pueblo, que constituirá un “sí mismx” colectivo. (Villoro Toranzo, 1998)
Los poderes y las ideologías políticas, para dar unidad a la comunidad y marcarle un sentido a su acción, suelen hacer explícita una interpretación de la nación, que se manifiesta en imágenes simbólicas y en narraciones sobre sus orígenes y metas. Son lxs diosxs tutelares, lxs héroes/heroínas y patricios, los relatos fundadores, las gestas históricas; pueden ser también ciertas instituciones políticas y ritos conmemorativos. Muy similar a la posición de Jesus García Ruiz al aseverar que en una sociedad “colectivista”, la dirección es más bien una lógica del grupo y está presente una dimensión fuerte de lealtad a lo que se emprende colectivamente, las relaciones afectivas están implicadas fuertemente, la pertenencia es un factor de responsabilidad y es en este registro donde se sitúa la gestión de las apariencias y es justo en este sentido y recordando a Bolaños quien sentencia casi parafraseando a Villoro, que, la identidad o suma de identidades se va constituyendo como la máscara que sirve, a la vez, para interactuar con los demás y protegernos del mundo y de los actores que vayan a contracorriente de lo que somos, pensamos o creemos. (Bolaños Gordillo, 2007)
Ciudadanía y elecciones
Los conceptos: ciudadanx y democracia tienen su origen en la historia griega, principalmente Aristóteles los refiere en su texto La política (Aristoteles). El/la ciudadanx es aquel que se forma en la ciudad, y ésta es una comunidad cuyo fin es la vida mejor entre familias y linajes, buscar una vida perfecta y autosuficiente, es decir, Aristóteles refiere a la ciudad como un espacio directamente relacionado para una vida bella y feliz; es una comunidad política que tiene por causa la práctica de las buenas acciones y no simplemente la convivencia, o sea que el/la ciudadanx es una construcción colectiva que sólo es posible en la ciudad. En la participación política están en juego conceptos como ciudadanía, institución política, elección, sistema electoral, voto, actor/a en política, cultura política y democracia, por destacar sólo las más visibles, por lo que las instituciones políticas son o es la idea promotora de cultura política y de una ciudadanía que debe apuntar hacia una alteridad.
En este sentido es de facto considerar que el espacio de la ciudadanía es más amplio que el electoral, ser ciudadanx no debe implicar una mirada reduccionista expresado mediante el voto en lo electoral, y que eso sea democracia, en todo caso sería únicamente una democracia parcial, una democracia política o una democracia de forma de gobierno, pero la democracia electoral, no es la democracia en el ámbito amplio de la sociedad como forma de vida y de amplias expectativas, es más bien la base de todo ello. Gimenez habla de la importancia del/la ciudadanx como actor/a social y que está dotado de una identidad, es la imagen distintiva que tiene de sí mismx el/la actor/a social en relación con otrxs, es en sí un atributo relacional y no una “marca” o de una especie de placa que cada quien lleva colgado del cuello. (Gimenez, G. 2009)
A manera de conclusión:
No hay identidad sin alteridad. México es un pueblo que requiere renovarse, refrescarse como cultura política, ya que esta no es estática, emprender la tarea de inclusión es un desafío constante para las personas, las familias, las comunidades y el Gobierno.
En un contexto así se construye un nosotrxs de frente a la diversidad, por lo que la acción política y el diálogo deben estar en constante movimiento y evolución, la alteridad desarrolla formas tanto de diálogo como de conflicto que antes parecían no existir. Si bien, en primera instancia, el Estado sigue garantizando la ciudadanía, la ramificación de los espacios de acción ciudadana adquiere un carácter profundamente complejo y expansivo, por tanto la política es algo constitutivo de las relaciones humanas en todos los niveles, lo político se apoya en lo moral, por lo que conceptos como libertad, derecho, sujeto o persona, se deben fundar en una actitud ética, en una ética de la alteridad, recuperar la identidad a través de la modesta reflexión personal, esta intimidad es lo más trascendente no sólo para la vida de la persona sino también para la ciudad o el Estado. La política en el deber ser, es un fluir de la empatía, una oportunidad para profundizar y evaluar las miradas propias sobre sí y sobre la alteridad.
Mirar y participar en lo electoral sin herramientas éticas, puede ser desgarrador. El reto frente a las elecciones del 2024 es que la ciudadanía en su voto haga valer las posibilidades de fortalecerse en su proceso de recomposición histórica y en la oportunidad de construir junto a las otras y otros la vida en sociedad desde la perspectiva de la solidaridad, el cual nos acerque a mejores condiciones en términos de derechos, justicia, equidad y libertad en todos los ámbitos de la vida humana y por ende colectiva.
Sobre el autor,
Manlio Fabio Diego Llamas es Psicólogo por la UAM Xochimilco, cuenta con Maestría en Gestión Directiva en Salud de la UVM Campus Coyocán, tiene la Especialidad en Ética y Sociedad por la Universidad ORT México, ha sido persona servidora pública en ámbitos de salud, participación ciudadana y desarrollo social, es profesor en nivel bachillerato, licenciatura y posgrado. Fundador del proyecto comunitario HumanisticaMente donde desarrolla conferencias y talleres por internet, así como organización de jornadas barriales a través de la planificación participativa, técnicas de educación popular y animación socio-cultural.
Bibliografía
1. Aristoteles. La política. vol. Sepan cuantos, México, Porrúa, 1967. Sepan Cuantos.
2. Bolaños Gordillo, Luis Fernando. “¿cómo se construyen las identidades en la persona?” Ra Ximhai, vol. 3, no. 002, 2007, pp. 417-428. http://redalyc.uaemex.mx/, http://redalyc.uaemex.mx/.
3. Cuche, Denis. “La noción de cultura en las ciencias sociales.” La invención del concepto científico de cultura, Nueva Visión, 1999, pp. 21-62. https://classroom.google.com/, https://classroom.google.com/w/MjUwNzExMjg2OTQ1/tc/MjYxMjQyODEzMTY3.
4. Forbes. “Comienza el proceso electoral 2021, el más grande de la historia de México.” Forbes Política, Forbes staff, https://www.forbes.com.mx/politica-comienza-el-proceso-electoral-
5. Gimenez, Gilberto. Materiales para una teoría de las identidades sociales. vol. II, México, conaculta, 2009. http://ru.iis.sociales.unam.mx/, http://ru.iis.sociales.unam.mx/bitstream/IIS/4985/1/Identidades_sociales.pdf.
6. Rico Moreno, Javier. “Octavio Paz y las metáforas de la historia.” Literatura Mexicana, vol. 26, no. 1, 2015, pp. 115-132. revistas-filologicas.unam.mx, filologicas.unam.mx/literatura- mexicana/index.php/lm/article/view/782.
7. Villoro Toranzo, Luis. Estado plural, pluralidad de culturas. México, Paidós, 1998. http://www.humanindex.unam.mx/, http://www.humanindex.unam.mx/humanindex/fichas_pdf/detalle_libro.php?id=3102.
8. Uso de imagen, pagina Alteridad: el otro, yo y la democracia deliberativa. camaracivica.com 2019
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